El Máster en Comercio Exterior, desde la voz de los expertos. Uno de los principales pilares de este postgrado es su profesorado. Una rica mezcla de docentes de la Universidad de Valladolid y profesionales del ramo. Lo que se traduce en la posibilidad de aprender teoría y práctica sobre el mercado. Sus últimas novedades legislativas, fronterizas o impositivas.
Así, los estudiantes tendrán información sobre el estado del arte del comercio exterior completamente actualizado. Sin embargo, lo más oportuno es que sean ellos mismos, los docentes, los que hablen del postgrado. De esta formación única en la que los alumnos pueden cursar todo un semestre en el extranjero (convenios), al igual que su practicum.
Responden a este breve cuestionario la funcionaria de la Agencia Tributaria y exdirectora de Aduanas en Castilla y León, Esperanza Castañeda, y el director general de la Fundación Observatorio Español del Mercado del Vino y gerente de la Fundación para la Cultura del Vino, Rafael del Rey.
Máster
Pregunta: Como profesor del Máster en Comercio Exterior de la Universidad de Valladolid, ¿Qué habilidades y conocimientos se fomentan en este post grado?
Esperanza Castañeda: El objetivo es tratar de aplicar los conocimientos adquiridos previamente y durante el Máster a la operativa de los operadores que realizan operaciones de comercio exterior. Se trata de fomentar la vertiente práctica de los conocimientos adquiridos.
Rafael del Rey: Se trata de un programa amplio en todas las áreas de conocimiento del comercio exterior, pero que además de la parte teórica, aporta también algunas clases y presentaciones concretas de sectores, como la referida al sector del vino. Es una oportunidad para los alumnos de conocer la realidad del comercio exterior aplicado a determinados sectores.
Por otro lado, la multiculturalidad y variedad de estudiantes hace del Máster un lugar privilegiado para entrar en contacto con otras realidades y otros puntos de vista.
P: ¿De qué manera puede influir este Máster en el futuro profesional de sus alumnos?
EC: En una visión más próxima a la realidad económica de las empresas que realizan este tipo de actividad.
RdR: Todo conocimiento es, por supuesto, útil. Pero en el caso concreto del Máster de Comercio Exterior se trata de una materia en la que el avance es claro y seguirá siéndolo durante muchos años. Pese a los problemas, la economía está muy internacionalizada, los bienes y servicios se realizan en un lugar para dirigirse luego a consumidores en otras partes del mundo. Saber cómo ocurre eso y analizar la economía mundial desde una perspectiva amplia es de gran utilidad.
P: ¿Hasta qué punto una formación especializada como la del Máster en Comercio Exterior es importante para una empresa que quiere abrir mercados o que ya opera fuera de sus fronteras?
EC: Conocer el marco teórico y las posibles incidencias que una actividad de comercio exterior puede tener en materia logística o fiscal siempre es una base imprescindible para la apertura de esta faceta de actividad.
RdR: Es esencial. Muchas empresas españolas, en casi todo tipo de sectores, desarrollan ya una parte importante de sus ventas y actividades fuera de sus fronteras. Tener los elementos fundamentales de cómo se hace eso, desde puntos de vista comerciales, administrativos, legales y otros es esencial.
P: En un contexto de mercado global, ¿se podría decir que el Máster en Comercio Exterior es ya una formación de presente, actual e imprescindible, en muchos campos mercantiles?
EC: Sí puesto que cuando se trata de empresas de un tamaño ya mediano es difícil que no tengan, sino como actividad principal, si cierta operativa con terceros países.
RdR: Sí, sin duda. Lleva ya muchos años siendo imprescindible por el grado de internacionalización de nuestra economía. Si para España en su conjunto más de una tercera parte del Producto Interior Bruto (PIB) ya se desarrolla fuera de nuestras fronteras, para un sector como el del vino, salen al exterior más del doble de los volúmenes que se venden dentro de España.
La internacionalización es un hecho y la mayor parte de las empresas necesita aplicarla extendiendo sus redes comerciales y actividad internacional.
P: Una de las bondades de este Máster reside en los convenios con otras universidades (21 de diez países distintos). Los alumnos pueden cursar un semestre en Francia, Italia o Alemania, entre otros, como primer contacto con el extranjero.
EC: Esta posibilidad abre una perspectiva internacional. Se trata de una experiencia muy importante a nivel no solo profesional sino también personal para los alumnos.
RdR: La comprensión de cómo la economía se ha globalizado va más allá de los conocimientos teóricos. Las empresas necesitamos, no solo personas con buenos conocimientos, sino sobre todo con una actitud positiva para moverse en ambientes internacionales, viajar, tener experiencia con otros entornos y culturas, en los que saber moverse.
Por ello, la relación con estudiantes que viene de otros lugares y, por supuesto, toda la experiencia que se pueda adquirir en otros países es parte esencial de la formación que necesitan las empresas españolas.
P: Asimismo, en el tercer y último semestre, los matriculados tienen la oportunidad de realizar las prácticas en el extranjero, lo que significa una oportunidad única de aprender en un marco internacional.
EC: Como he mencionado, ofrece la posibilidad de mirar, de contemplar, la realidad del mercado más allá de las fronteras nacionales. Un bagaje que se traduce en una experiencia personal y profesional.
RdR: De nuevo, es muy útil poder hacer prácticas en el extranjero como forma de mejorar conocimientos, idiomas y, sobre todo, formas de entendimiento, colaboración e intercambio con personas de otros países y otras costumbres.
P: Entre el profesorado hay docentes de la Universidad de Valladolid y profesionales como usted, con años de experiencia en el sector. ¿Cómo se traduce este maridaje en la formación que reciben los alumnos?
EC: De este modo se traslada la experiencia docente y profesional de los profesores. No hay que olvidar tampoco la perspectiva pública y privada de esta formación, dada la composición del profesorado.
RdR: No es tan frecuente en otros programas como quizás debiera serlo, pero me parece una gran idea y una buena aportación a los estudiantes que realiza este Máster en concreto. Se trata no solo de dar unos conocimientos teóricos, que son la base del aprendizaje y deben tenerse, sino también de ver cómo se aplican esos conocimientos a la realidad de los sectores y de la economía de nuestro país.
Así pues, trasladar a los estudiantes las preocupaciones, la visión, los problemas y las oportunidades de sectores concretos de nuestra economía, es una actividad algo diferente, pero creo que muy enriquecedora.
P: La Facultad de Comercio cuenta con numerosos convenios con otras universidades, lo que favorece que alumnos de diferentes países coincidan en clase. Desde su punto de vista, ¿Cómo es la experiencia de los alumnos de convivir con diferentes culturas en el mismo espacio académico?
EC: Desde mi punto de vista se respira un buen ambiente de intercambio cultural, además de académico. Creo que una vertiente más que hace especialmente atractivo este Máster en Comercio Exterior.
RdR: Muy positiva. Forma parte de ese mismo objetivo de convivencia en entornos internacionales. La internacionalización de la economía no solo es conocer el comercio y las inversiones internacionales, sino también una forma de entender el trabajo, de interrelacionarse con otros profesionales, conociendo y admitiendo la diversidad. Y es también una oportunidad para mejorar idiomas, que es parte esencial de ese aprendizaje.
P: Finalmente, ¿Qué destacaría del Máster en Comercio Exterior?
EC: Su perspectiva multidisciplinar y adaptada a la realidad de la empresa.
RdR: Su carácter verdaderamente internacional, la posibilidad de prácticas y la mezcla de conocimientos teóricos con clases o presentaciones de sectores específicos.